La pelona.
La pelona vendrá hoy a por la negra,
hará su último viaje,
ella lo sabe, la espera desde hace muchos meses,
no tiene ningún miedo,
ha viajado mucho,
viajo hasta la otra parte del mundo siendo todavia una niña,
ha recorrido escenarios de medio mundo,
ha conocido músicos de todos los países,
nunca fue extranjera,
los apátridas son los únicos que pueden permitirse llamar a la tierra hogar,
hace un par de años que ya no puede bailar,
le tiemblan las piernas,
se ahoga, quizá por fumar desde hace sesenta años,
sabe que siempre ha hecho lo que ha querido,
y de las únicas cosas que puedes arrepentirte son de las que no hiciste,
ha vivido mucho,
ahora espera que los jóvenes sigan viviendo la vida,
entre ellos sus nietos y bisnietos, esos que vienen a visitarla tan amenudo,
la pelona trabaja día y noche y siempre agradece un buen café,
mira a la negra y sonríe,
le dará un último baile mientras se hace cargo de esa taza que tanto necesita.
